jueves, 23 de diciembre de 2010

Cántico a mi pensar

Se me quiebra la voz, se me ponen algo llorosos cuando a mi mente vienen canciones como "Vuelvo" de Illapu, o "tiempo en las bastillas" de Fernando Ubiergo. Hoy hablaba con mi mamá algunos hechos que hacen interesarme más por la historia de mi país, por la libertad de la tierra y por volver a nuestras raíces. Es un poco extraño el aire que respiro en estos momentos, y recuerdo aún las palabras de alguien vagamente olvidado por el recuerdo y el polvo, diciéndome 'tú reclamas porque no tienes tiempo y quieres ir a marchar por los derechos...'
Por supuesto, quiero hacer algo porque me interesa y creo en que puedes lograr algo actuando y no quedarte sentada mirando como todo pasa. Es bueno hacerse a un lado en cosas netamente ajenas, pero no cuando se trata de la igualdad educacional, que, querrámoslo o no, está muy distante de ser igual para todos.
Leyendo la interpretación política de Chile, hay cosas que simplemente la gente prefiere olvidar (o tratar por lo menos) para que la historia no los condene luego. Me pregunto, ¿Dónde quedan las disculpas? ¿Qué cuesta simplemente decir las cosas de frente y bien derechamente, en lugar de deshumanizarte poco a poco? Es fácil quedarte con lo que escuchas pero poco más cuesta agarrar un libro e informarte para hablar con fundamento si tanto te interesa que seas escuchado y no crean que eres un bravucón que sólo repite lo mismo que hemos estado escuchando todos estos años.
Y lo más interesante es que te informas y respetas a la gente con ideas opuestas (siempre y cuando éstas tengan base, garantía y respaldo) pero cuando te toca alzar la voz eres un resentido, un izquierdista que sólo está en desacuerdo con todo la sociedad (error garrafal) y lo que dices no tiene más fundamento que eso: eres comunista.
Hace falta crear conciencia de lo que se trata el respeto mutuo de las ideas, el pensamiento es lo más fuerte que el ser humano puede tener y utilizar para dejar en claro la grandeza que se esconde tras los muchos proyectos que abundan en la conciencia pero que muy pocos son capaces de hacer válidos. El progreso sólo por el progreso mismo es una idea a mi parecer estúpida porque eso no te ayudará a enlazar a un pueblo que quiere conservar su dignidad como tal. 
A ese progreso sólo le llamo destrucción del entorno.
Y es en ese punto que me quiero detener, hablando de emociones y ganas de pertenecer a una ONG en la que prime la conservación en muchos aspectos del mundo. No sólo la naturaleza, la escasez de agua en el mundo, la quema y tala indiscriminada de bosques, la caza masiva de especies en peligro de extinción, la utilización desmedida de combustibles fósiles, la competencia (muchas veces invisible a quienes no quieren ver) armamentista que ocupa lugares y energía innecesariamente, o las emisiones de partículas altamente tóxicas o gases de invernadero, sino el cuidado de lo que es llamado en nuestros tiempos una verdadera bomba de tiempo. ¿Qué ocurre con el continente Africano? ¿Quién hace algo contra las "pruebas" en la población africana? Así que por que no tienen esperanza alguna de futuro o proyección, vamos, probemos las vacunas en ellos, si se mueren qué más da. Explotemos sus recursos, total, qué más da si no tienen IDEA de lo que es un diamante precioso o cuánto vale tal o cual cosa. Quitémoselo, a ellos no les sirve, a nosotros, "gente civilizada" si.
Falta gente que quiera hacer algo al respecto. Hasta cuanto se acepta la discriminación racial (porque no me vengan con el cuento de que no se le llama discriminación) que aparece camuflada bajo el nombre de estas atrocidades contra los derechos humanos.
Si, porque todo ser humano tiene derecho a vivir, y poniéndonos repetitivos, sin importar color, sexo, o edad. (no puede ser que a un anciano, sólo por el hecho de ser anciano, no le den tanta prioridad como a un joven)
Hace falta gente que quiera luchar por la igualdad de condiciones. Hasta cuando algunos pocos tienen derecho sobre los demás. Hasta cuando no hay respeto ni por el mundo en que se vive ni por la gente que lo habita. Hasta cuando tanta injusticia. 
Y si po, me emociona escuchar esos cánticos a la vida, a la libertad y al amor por la tierra.
Y puede ser que el hombre haya olvidado muchas cosas, no haya presentido nada y la historia hable por su propia cuenta.

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