Take me out... to night...
Con esa y otra cancioncita más tarareando me acuerdo que tengo un blog y me nace el teclear un par de pensamientos.
Hace poco llegué de mis vacaciones. "Cortitas" producto de un par de movilizaciones, pero mejor aprovechadas que nunca. Un febrero renaciente, sol saliente, que florecen deseos, que se callan mis silencios incómodos.
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Chile parece un mar de sentimientos encontrados.
Posee una riqueza histórica monumental, digna de admirarse. Posee escritores que han cultivado un sentimiento poético/cultural a distintas índoles nacionales. Se planta como una "angosta franja de tierra" en el fin del mundo. La rodea una cordillera extenuante, campos de hielo, tres naciones hermanas (si, hermanas al fin y al cabo, aunque se apele a la Haya y más de alguna vez a uno se le de vuelta la chaqueta), y un mar inquietante de tanta inmensidad, que hace cuestionarnos el sentido de ser tan pequeños en un mundo tan grande. O en un Chile también pequeño.
Hay una especie de carácter que indentifica mucho al roto chileno, al chileno de bajo pueblo, al hijo de la tierra mitad indígena mitad español, o quién sabe cuántas mezclas más que forman un temperamento físico y sicológico bien definido en todas las muestras del ser.
Esa identidad conmociona, emociona y mueve montañas. Yo lo veré de un modo muy personal que me pareció curioso constatar en las calles de Valparaíso, de Viña, de Isla Negra, del Tabo, entre otros.
Creo que uno de los episodios que más me ha llegado ahora último es, cuando al sentarme con mis papás a tomarme algo, de conversa salio el festival de Viña. Se aludía a una cierta "Edad de oro" en el que mi papá extrañaba a Vodanovic, una cancioncita añeja, el cómo "El tata" llegaba sin ser pifiado, que los generales, la Lucía Iriart, los grupos que por dictadura no vinieron a Chile, los años 80, que la CNI andaba con el ojo vivo por esos años, que el conflicto Chile-Argentina, un "solo le pido a Dios" de Gieco, la venida del Papa Juan Pablo II, "mensajero de la vida, peregrino de la paz", las Malvinas, que Argentina fue devastado por unos "Boy Scouts ingleses", las viudas de la Plaza de Mayo, la Dictadura y su relación con aquel conflicto bélico, que el Estadio Nacional, que Rogelio Ugarte, Avenida Matta, Avenida Grecia y el llanto de los torturados cada noche escuchado por un amigo de mi tata.
Desglosando, se me llena de emoción el alma tan sólo escuchar los ecos de una etapa que de forma muy lenta trata de curarse. Una emoción triste, una opresión a todas las expresiones.
Y analizando, me percato de que Chile esconde tras sus muros un sin fin de relatos que forman esta llamada "identidad nacional" Que pese a todo, de algún modo sacó fuerzas para distraerse de todo lo que ocurría en esos años.
Y es ahí donde mis papás se acordaban de sábado gigante.
"Uno esperaba tooooodos los sábados a la una y media para ver Sábado Gigante, cuando era chileno. Era pa cagarse de la risa! salían cosas tan chistosas... si cacha que iba gente TAN humilde que se emocionaaaba cuando se ganaba un televisor, y toda la familia entraba al estudio abrazarlo y mientras más llorabay, más premios te daban: SE GANÓ UNA PLANCHAAA! UN LIVING!! y cuando a veces los tipos andaban solos, sin familia, iba el público y lo abrazaba y celebraban con él. Era emocionaaaante. Hacían concursos como 'envíe un sobre con 100 bolsitas de té tanto tanto' en ese tiempo era así, hoy en día es mensaje de texto o esas cosas. Ahí nació el chacal de la trompeta po, la Cuatro dientes, el Bombo fica, el Lucho Jara... era güeeeeeeeeeeeeeeno. Después se fueron a Miami y ahí murió. Niun brillo."
Si uno escucha eso, por lo menos a mí me pasa, me sube una alegría cálida. Es como ver una nación unida por el humor, la risa, las buenas acciones. Una distracción, podría llamarse, donde las telecomunaciones no eran masivas y la gente compartía en familia gratos momentos. Logró recordarme también varios pasajes de mi infancia, con olor a té con leche condensada, la Población Cristal Chile, mis abuelos, mis primos, el perro, los regalos traídos de Arica o Tacna, Sandy Papo.
"El festival de Viña era güeeeeeno, con el 'Buenas noches Viñams' de Vodaaaaanovic po, si él le ponía elegancia a la cosa, antes era importante la competencia internacional, si de ahí cuántos no salieron? Fernando Ubiergo, Gervasio... quién más, Lore? hasta Shakira salio de ahí, aunque no la conocía nadie. La canción de Frank Sinatra... Ubiergo... güeeeeeno él, deberían llevarlo de nuevo. Tiempo en las Bastillas es una canción super linda po!"
"Ahora es como el himno de los 80, por la serie"
"Güena esa serie, Daniel Muñoz actúa super bien. La Tamara acosta también, súper bueno. Da nostalgia recordar tantas cosas, cuando recién te fueron a poner el teléfono, autos de esa época, la CNI brava pero brava, eran unos conchadesumadre. Aquí pagaron los valientes, lamentablemente. Si los cobardes políticos arrancaron po, y se llenaron de plata el bolsillo en el extranjero, y llegaron con sus consignas y demases, mientras que aquí cuánta gente no sufrió!"
Y me quedé pensando unos cuantos asuntos... y se me llenaron los ojos de lágrimas otra vez.
